El show empezaba a las 12 minutos del sol despertar,
con alergias y estornudos, con ciclopes dudando de los espejos, empezaba sin alcohol,
sin relojes, al inicio siempre le faltaba el toque clasico de un soundtrack.
Le contrarrestaba la nomina de los dramas, de las lagrimas mal pagadas,
del sentido perdido en las sabanas que duermen al medio dia,
sin siestas ni fiestas en noche buena, tampoco fiestas de cumpleaños perdidos,
sin funerales ni muertes importantes: "Que tristeza mas vacia", dirian los
que me ven sonreir.